Y entonces te preguntas ¿Por qué lo hice? ¿Qué ganaba con ello? Y descubres que el sufrimiento de los demás ya no te alegra el día, sino que te recuerda lo mal que estás tú y que ni si quiera los que están a tu alrededor pueden ser felices, y cuando intentas mejorar las cosas, ayudar a las personas que te quisieron y a las que les diste la espalda, ya es demasiado tarde, porque ellas ya no te quieren y ahora son ellas quien te dan la espalda a ti.
Pero no importa, no vale lamentarse ni llorar, sigue adelante, porque si esas personas se fueron de tu vida significa que no serán importantes para tu futuro. Solo sonríe, mañana será un día mejor =)
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